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El Museo Etnográfico de Grandas de Salime en la encrucijada

Inauguración de la actual sede del Museo Etnográfico de Grandas de Salime en marzo de 1989. Fuente: La Nueva España

En medio de la incertidumbre que se cierne sobre el futuro del Museo Etnográfico de Grandas de Salime y también del castro de Chao Samartín, nos parece oportuno recordar hoy las palabras del expresidente del Principado de Asturias, D. Pedro de Silva, artífice, junto con el llorado exalcalde de Grandas, D. José Cachafeiro, de la compra y dotación de la sede actual del Museo. Se trata de reflexiones expresadas en la conferencia “Memoria de pros y peros”, pronunciada el 7 de febrero en la Junta General del Principado de Asturias con motivo del XX aniversario del Estatuto de Autonomía.

Os adjuntamos el texto íntegro de la conferencia así como el enlace con el artículo, “Asturias debe ser un museo vivo, no un parque temático", publicado en el diario La Nueva España unos días más tarde en el que se recoge la valoración sobre la importancia del Museo Etnográfico para Grandas de Salime pero también para Asturias. Así como algún comentario acerca de comportamientos políticos de consecuencias nefastas para el conjunto social.

“Fue entonces cuando empecé a darme cuenta del grave caso de autismo que aquejaba a los máximos dirigentes de mi partido. No es que no respondieran, es que ni siquiera oían. Estaban insonorizados por la soberbia o la autocomplacencia. Su intelección funcionaba en circuito cerrado, era un sistema sin retroalimentación. Esos sistemas pueden llegar a ser muy duraderos, pero cuando colapsan no hay quien los reconstruya, y hay que empezar de cero. De cero patatero.”

“(…) existe un continente inmenso por descubrir. Es el continente Asturias, una región pequeña en los mapas, pero hondísima en la historia, que en muchos aspectos sigue como estuvo siempre, lo que la convierte en un fósil viviente de inapreciable valor. Hablo, pues, de profundizar en nosotros mismos, si se quiere como pueblo, si se quiere como suma de realidades materiales, da igual. Es a eso a lo que llamo, en una expresión que puede ser impropia, profundización autonómica. Podemos utilizar otras expresiones: recuperar el alma; reencontrarnos con la memoria; reconstruirnos como cuerpo histórico. Ya ven que hablo del alma bajo una concepción material: está en las cosas. Hay que tratar de que esa memoria material se refleje en nuestra conciencia.”

“Acabado el carbón, o no muy lejos de estarlo, nuestra materia prima, repito, puede ser la historia, y la naturaleza que la determina. Pero, claro, no bajo una idea consuntiva, depredadora, sino de recuperación con el mayor respeto: el que merece un tejido esencial de nuestro propio organismo.

Pondré un pequeño ejemplo, para que se entienda mejor. En Grandas de Salime se está investigando un castro prerromano, luego romanizado, de incalculable valor, el del Chao San Martín. Los hallazgos son deslumbrantes. En la propia Grandas se desarrolla también una de las experiencias museísticas más brillantes que conozco, la del Museo Etnográfico, obra de Pepe el Ferreiro. A veces, en el yacimiento arqueológico, aparecen elementos domésticos o instrumentos de hace en torno a veinte siglos, que no se sabe que función tenían. En más de una ocasión la respuesta se ha hallado en el Museo Etnográfico, pues un elemento semejante aún se usaba en los hogares o el trabajo hasta hace poco, o ahora, cuando lo encontró en ellos El Ferreiro. ¡El Castro y el Museo interactúan, se dan explicaciones uno al otro, con dos milenios por el medio! Grandas, en buena medida, vive hoy pendiente del Museo, que es uno de los más visitados de Asturias, y también, cada vez más, del Castro. Ese juego sorprendente y sutil es ya uno de los activos económicos y sociales del Concejo, y todos allí lo saben.”

“Descubrir ese continente perdido es una tarea urgente, porque las aguas lo van cubriendo día a día: caminos rurales que desaparecen para siempre, toponimia que se extingue en la memoria, Parroquias que olvidan su estructura funcional o la distribución económica de los espacios, pueblos que se arruinan. ¡Que gran empresa sería un esfuerzo con verdadera potencia y ambición para evitarlo, y que gran inversión, en nosotros mismos, a medio plazo! La recuperación de Asturias pasa, así, por recuperarnos.”